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La farmacéutica Merck ha alcanzado un acuerdo para la adquisición de Caraway Therapeutics, una empresa biotecnológica especializada en el estudio de la maquinaria de eliminación de residuos celulares.

Caraway Therapeutics cuenta con cuatro programas de fármacos en fase preclínica, siendo el más avanzado dirigido a un canal iónico que Merck ya tenía en su radar.

La transacción, valuada en hasta 610 millones de dólares, incluye un pago inicial no revelado y pagos condicionales por hitos.

A pesar de mantener un perfil discreto, Merck ha mostrado interés en el portafolio de Caraway Therapeutics debido a su gran potencial. La biotecnológica se centra en el desarrollo de tratamientos para enfermedades raras y neurológicas que buscan restaurar el equilibrio celular.

Caraway Therapeutics, anteriormente conocida como Rheostat Therapeutics, recaudó 23 millones de dólares en una ronda de financiación de la Serie A en 2018, respaldada por diversos fondos de riesgo farmacéuticos, incluido uno de Merck.

La compañía opera en el campo de las enfermedades raras y neurológicas, explorando cómo dirigirse al canal iónico TRPML1 puede contribuir al tratamiento de enfermedades como la enfermedad de Parkinson asociada a mutaciones en el gen GBA.

Esta adquisición es la última de un activo año de negociaciones para Merck, que previamente adquirió Prometheus Therapeutics por aproximadamente 11.000 millones de dólares a principios de 2023, obteniendo un fármaco para la enfermedad intestinal en fase avanzada.

Además, en octubre, acordó pagar 5.500 millones de dólares a Daiichi Sankyo para acceder a tres conjugados anticuerpo-fármaco contra el cáncer.

La inversión de Merck en Caraway Therapeutics refleja el creciente interés en el sector de neurociencias, que muestra signos de recuperación en los últimos años, después de que muchas grandes farmacéuticas abandonaran o redujeran la prioridad en este campo a finales de la década pasada debido a reveses clínicos.

Con información de: ConsultorSalud.

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Bayer, la multinacional farmacéutica, ha inaugurado una nueva planta de producción en su sede en Berlín, tras invertir 130 millones de euros en el proyecto.

Esta expansión forma parte de un programa de inversión de miles de millones de dólares con el objetivo de fortalecer la red mundial de producción farmacéutica de Bayer.

La nueva instalación en Berlín cuenta con tecnología de vanguardia, procesos automatizados y una producción innovadora.

Es un paso clave en la estrategia global de Bayer para fabricar formas farmacéuticas líquidas, como soluciones de inyección e infusión.

La compañía busca abastecer a los mercados de Estados Unidos, Europa y China con esta inversión.

Stefan Oelrich, miembro del consejo de administración de Bayer AG y director de su división farmacéutica, destaca la importancia de seguir una estrategia clara de política de innovación orientada al futuro.

Kai Wegner, alcalde de Berlín, subraya que esta inversión no solo demuestra fidelidad a la ubicación, sino que también fortalece la posición de la ciudad como una metrópolis sanitaria destacada.

Las nuevas instalaciones se basan en una plataforma tecnológica innovadora que cubre una amplia gama de productos farmacéuticos parenterales.

El proceso de fabricación altamente digitalizado permite la formulación, el llenado y la liofilización de productos de manera segura, rápida y estéril. La instalación se enfoca en áreas críticas con alta demanda médica, como productos oftalmológicos.

Con un beneficio registrado de 4.150 millones de euros en 2022, Bayer ha cuadruplicado sus ganancias en comparación con los mil millones de euros de 2021, según los últimos resultados económicos anuales publicados.

Esta inversión refleja el compromiso de Bayer con la innovación, la producción eficiente y la expansión de su presencia en mercados clave.

Con información de: PlantaDoce.

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